Mientras que muchas empresas siguen atascadas en sus procesos de transformación digital bajo el mantra impuesto por lo Digital Native, o enfrascadas en procesos de modernización de su legacy hacia soluciones Cloud Native, llega el momento de volver a repensar todo bajo un nuevo paradigma: AI Native.
Fue en 2016 cuando Sundar Pichai (CEO de Google), en su primera carta anual a su equipo, escribía:

“Over time, the computer itself—whatever its form factor—will be an intelligent assistant helping you through your day.
We will move from mobile first to an AI first world.
Most of these computing experiences are very likely to be built in the cloud.

En ella ya predecía como la IA iba a tomar el control de nuestro día a día y cómo el cloud computing iba a ser su habilitador.
De hecho, un año después, en el Google IO de 2018, el mismo Pichai presentaba Google Duplex con una demo que dejó al mundo con la boca abierta. Un asistente virtual que llamaba a una peluquería en tu nombre y era capaz de reservar una cita de forma autónoma.

Sin embargo, a pesar de esa demo y aunque la inteligencia artificial lleva varias décadas entre nosotros, su aplicación real y productiva ha sido más paulatina. Estos sorprendentes avances donde los grandes players de IA deslumbraban con demostraciones o sesudos artículos, muchas veces se quedaban en material de laboratorio que aún necesitaba ser madurado hasta que realmente fueran estables y se pudiesen aplicar en el mundo real.

Pero esa espera está llegando a su fin. La digitalización y la hiperconectividad que nos dio el omnipresente móvil ha contribuido a tener gran cantidad de datos digitalizados. La evolución del Cloud ha aportado capacidades inimaginables de cómputo, globalización y escalabilidad. Todo esto ha sido un caldo de cultivo para conseguir que la IA haya madurado hasta llegar a considerarse estable en la resolución de múltiples tipos de problemas.

Si a esto le sumamos la revolución de los LLMs (popularizados por su aplicación Chat GPT), nos encontramos con que ya tampoco hacen falta complejos y caros sistemas de IA para desarrollar aplicaciones que antes solo se podían permitir unos pocos. Ahora ya no es necesario entrenar modelos específicos para cada necesidad.

Como se puede ver en el gráfico, toda esta evolución se ha ido fraguando a lo largos de las últimas décadas y, al igual que hoy se etiquetan a las generaciones nacidas en la era del PC, de Internet, o del Smartphone, estoy seguro que dentro de unos años todo el mundo recordará a esta generación como los que han nacido en la era de ChatGPT, la era de los AI Natives.

La era de AI Natives
La era de AI Natives

Esto es un cambio generacional con muchísimas cosas de las que se podría hablar pero, por lo que a mí me toca, hoy voy a tratar sobre algo mucho más concreto: mi visión sobre cómo serán las nuevas soluciones digitales que esta generación demandará. Lo que hemos llamado AI Native Solutions.

¿Qué significa ser "AI Native"?

“AI-Native applications are designed and built from the ground up with AI as an integral part of their core functionality.”

Una aplicación "AI Native" es aquella que, desde su concepción, está diseñada con la IA como componente central e indispensable de tal forma que sin ella no podría existir. No se trata de añadir una capa de IA a un producto existente, sino de construir una solución digital donde esta tecnología sea el motor que impulsa todas sus funcionalidades.

Creo que este tipo de cambios ya los hemos vivido antes y, en particular, este me recuerda mucho a la introducción del smartphone, especialmente desde la salida del iPhone en 2007. De repente se puso a disposición de los usuarios una gran cantidad de nuevas capacidades: poder navegar desde cualquier lugar con tu móvil, pantallas táctiles, acceso a cámara, a GPS… En su momento, vivimos una etapa de transición con aquellos diseños “responsive” que intentaban adaptar lo que ya existía en Web a una pequeña pantalla, pero pronto nos dimos cuenta de que los cambios eran mucho más profundos. Hubo que redefinir completamente la experiencia de cliente. Esto mismo está pasando con las nuevas capacidades que la IA nos está dando.

¿Qué pilares sustentan una solución AI Native?

Nuevas capacidades

La aparición de ChatGPT supuso un salto cualitativo en las capacidades de la IA para mantener conversaciones humanas, pero detrás hay mucho más. Supuso un paso hacia la AGI (Artificial General Intelligence).

Donde antes se necesitaban múltiples modelos entrenados específicamente para ciertas tareas, de repente, con uno solo, somos capaces de solicitar que haga múltiples tareas:

Y es que, ahora, cuando desarrollemos una aplicación, deberemos cambiar nuestro mindset a la hora de pensar qué podemos ofrecer a los usuarios. Ahora es mucho más fácil hacer cosas hasta ahora muy complejas o costosas.

Imagínate estar creando una web de viajes que tenga un buscador que pueda darte solución a una petición como esta: “quiero vacaciones en un sitio que haga tiempo para bañarse en diciembre, un plan para pasar la nochevieja y que hablen español”. Tecnológicamente, construir esto con las capacidades habituales de un buscador sería altamente complejo. Sin embargo, esto mismo se lo he pasado a Gemini o ChatGPT y me da resultados perfectos que podríamos usar en nuestro producto.

Generative UIs

Empezamos ya a ver cómo los equipos de diseño deben también cambiar su mindset. Donde ahora diseñan el mejor flujo posible para la mayor parte de usuarios, pasarán a crear objetivos y guardarraíles para que la IA construya la mejor interfaz en ese momento, para esa persona, y teniendo en cuenta su histórico y su contexto actual.

Ya existen ejemplos en entornos de Call Center, con interfaces para agentes de atención al cliente que se van adaptando según se introduce información o incluso basado en la conversación que están teniendo.

Siguiendo con la analogía de la era móvil, mi visión es que estamos aún en la era “responsive”, es decir, en una etapa de transición. Probablemente, durante los próximos años tendremos interfaces híbridas donde la IA generará pequeños bloques de interfaz customizados. Por ejemplo: un usuario de una compañía de telefonía está viendo sus consumos y la IA, al ver que en el listado aparecen números extranjeros, le genera un widget que permite comprar un bono roaming o bloquear llamadas internacionales.

A futuro, me imagino que poco a poco esto irá dando paso a pantallas altamente customizadas generadas por esa IA donde el número de combinaciones será enorme.

Agentic AI

El nuevo término de moda Agentic AI se refiere a sistemas de inteligencia artificial que poseen un grado de autonomía, capaces de tomar decisiones, planificar acciones y aprender de experiencias para alcanzar objetivos específicos sin intervención humana constante.

De nuevo un cambio de mindset, ya que ahora hay múltiples acciones donde la AI puede automatizar trabajo por ti. Esto está redefiniendo los procesos sobre todo en el mundo empresarial. A muchos nos vendrá a la cabeza los RPAs. Alguien podrá pensar si los van a sustituir pero, a día de hoy, los veo más como un aliado que es capaz de complementarlos tomando decisiones en escenarios ambiguos o donde hasta ahora hacía falta una intervención humana en ciertos momentos del flujo para que este pudiera continuar.

Siguiendo con los ejemplos, aquí tenemos el de Agentforce de Salesforce. Este sistema, a través de su conexión con Google Workspace, es capaz de crear presentaciones en Google Slides o actualizar registros en el CRM de forma dinámica basándose en conversaciones en Gmail, proporcionando un flujo de trabajo automatizado y sin interrupciones para los equipos de ventas.

Vivimos tiempos de cambio…

Es tiempo de cambio, la generación de los “Digital Natives” irá dando paso a la de los “AI Natives” y toca volver a adaptarse sin haber terminado de adaptarnos a lo anterior.

Hay muchas preguntas aún por resolver: ¿para qué casos de uso la IA está ya madura y para cuales aún hay que esperar? ¿Qué barreras se están encontrando las empresas para adoptar este enfoque? ¿Qué tipo de productos digitales demandará esta nueva generación de “AI Natives”?

Desde Paradigma estamos construyendo y adaptando continuamente esta visión, ya que la velocidad con la que está evolucionando esta tecnología es impresionante. Lo que hoy no es posible, dentro de un mes puede que lo sea. Donde hoy hay que montar un sistema con relativa complejidad para hacer funcionar un caso de uso, mañana te lo dan como servicio… Como tecnólogo se me ocurren pocos momentos de mi carrera más interesantes (a la par que estresantes) que lo que estamos viviendo desde 2022 y, si algo tengo claro, es que esto marcará un antes y un después.

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