Tecnología, charlas y mucha IA: así fue la VI edición de Paradigma Open Space.

Aún recuerdo cuando, a finales de 2018, un pequeño grupo de compañeras y compañeros empezamos a soñar con la organización de un Open Space en las oficinas de Paradigma. También recuerdo las primeras reuniones, ya en enero de 2019, y los nervios que teníamos al ver que por fin estaba a punto de materializarse el evento que tanto habíamos imaginado.

Éramos principiantes en este tipo de conferencias (donde recordemos que hay una presentación previa de las charlas y las personas que asisten son las que votan y de esta manera se conforma la agenda), pero demostramos que nada es imposible si dedicas ingentes cantidades de trabajo e ilusión. Y el 23 de febrero de 2019 vio la luz la primera edición de nuestro evento.

Ahora, con muchas lecciones aprendidas, este año hemos celebrado la sexta edición de nuestro Open Space. ¡Y no podemos estar más felices!

Aunque el evento se celebró un sábado, casi un centenar de personas tuvieron la oportunidad de compartir conocimientos y experiencias y disfrutar de una mañana entre colegas, independientemente de la empresa a la que pertenezcan.

Ya desde el desayuno en la terraza (afortunadamente la lluvia nos permitió realizarlo al aire libre) empezaron a formarse los corrillos, entre abrazos y apretones de manos, los debates y las conversaciones de todo tipo.

Keynote a cargo de Román Martín Gil, de Red Hat

Tras las dosis de cafeína y azúcar, combustible fundamental para afrontar todo lo que se nos venía encima, estaba todo preparado para el plato fuerte: la keynote de Román Martín Gil, que nos habló de Developer Experience.

Ante un público mayoritariamente técnico, empezar la mañana rememorando a un sudoroso Steve Ballmer arengando a los developers, es tocar techo. Pero su charla no defraudó, poniendo el foco en la importancia de la experiencia de los equipos de desarrollo y en los resultados que se obtienen de tenerla en cuenta.

Elección de la agenda

El núcleo de un Open Space es la creación de la agenda de charlas. Las personas son las que las proponen y son ellas las que las eligen.

Aunque las normas estaban claras, nuestro compañero Adrián nos ayudó a que el proceso se desarrollara de manera organizada y, en menos que canta un gallo, estábamos votando nuestras charlas favoritas (aunque más de uno tuvimos sentimientos encontrados, porque casi todas eran interesantísimas y solo podíamos votar a 3).

Una vez votadas, se organizaron en las salas y dio comienzo el peregrinar de una charla a otra.

La IA, la reina del baile

El tema estrella de esta edición era fácil de adivinar: las IA’s (6 de las 12 charlas). Y abarcaron todas las temáticas: vimos cómo detectar matrículas con Openshift AI, hablamos sobre la experimentación de software para proyectos con D2 y redes neuronales y las complicaciones a las que se enfrenta (problemas con el dataset de origen, limpieza de los datos, poca variedad de datos o la “caja negra” que supone trabajar con redes neuronales).

Además, debatimos sobre el uso de la IA en el mundo del testing (aunque dudo que solucionásemos nada, lo interesante fueron los diferentes puntos de vista). Conocimos, de la mano de compañeras de Google Cloud, la potencia de GenAI y nuestros compañeros de Goodly nos mostraron lo fácil que es sacarle partido a los LLM’s gracias a GenKit.

Incluso vimos el “lado oscuro” de las IA’s, esta vez aplicado al mundo de los videojuegos y cómo su uso (y su abuso) está influyendo negativamente en la creatividad y riqueza de estos mundos virtuales (y aumentando el ratio de QA’s por desarrollador/a).

Pero hubo más...

Y muy variado. Debatimos sobre las metodologías ágiles, su uso y la frustración que produce en ocasiones y también las desventajas de la sobre-arquitectura a la hora de desarrollar aplicaciones.

Asistimos atónitos/as a la conversión de una máquina virtual clásica en un contenedor con Red Hat OpenShift Virtualization. También vimos cómo introducirse en el complejo mundo de la ciberseguridad para luchar contra el phishing y la instalación de malware.

Incluso hablamos de Front, debatiendo sobre la “backendización” del desarrollo front o aprendiendo a enrutar dinámicamente gracias a Native Federation. Para todos los gustos y en todos los formatos, todas las charlas hicieron las delicias del público asistente y, en el coffee break y la comida final, seguimos comentando los contenidos de nuestras charlas favoritas.

Y, como no, los agradecimientos

Este evento no habría podido realizarse sin la inestimable colaboración del equipo de Marketing de Paradigma y su inagotable energía, ni de los voluntarios y voluntarias que se desvivieron para que el programa del evento se desarrollara correctamente y no faltara un detalle en las salas.

También hay que mencionar a Laura y Coral, que realizaron la facilitación gráfica de las charlas y que convirtieron nuestro lineup en una auténtica obra de arte que nos dejó sin palabras.
Y a todas las personas que decidieron venir, un año más, a compartir una mañana de sábado. También a Red Hat, Google Cloud y Goodly por apoyar el evento un año más.

Os esperamos en la próxima edición. ¡No faltéis!